Descubriendo la Plaza Foch

Después de un día cansado, lo único que quieres es distraer tu mente y salir de la rutina diaria. Lo general para los quiteños es ir a la Plaza Foch, donde en cada esquina encontrarás una nueva historia. Además, de encontrar bares, discotecas, karaokes y todo tipo de lugares para todo tipo de gusto. Al llegar a esta zona rosa de Quito, incluso no sabes donde dirigirte ya que en el centro hay un grupo de personas que te ofertan las mejores promociones en cada local.

Te encuentras con muchas voces por aquí y por allá que te dicen que si vas al lugar donde ellos laboran, te darán peceras gratis, vodka, pase para que una persona no pague la entrada, entre más ofertas. El centro de la Plaza Foch se ve inundada por estudiantes que, al salir de sus estudios, se reúnen con más amigos para dirigirse a bailar o cantar en este espacio de entretenimiento nocturno.

A las 18H00 se empieza a prender el ambiente y al pasar por cada calle, logras escuchar música sobre todo de reggaeton que es la más predominante en esta zona. Mientras buscas un lugar donde bailar puedes detenerte un momento e ir a comer en distintos lugares que también existen en esta zona, tales como la pizzería Los Tíos, KFC, Pollo Campero y opciones típicas del lugar como los shawarmas.

Caminando por esta zona es inevitable ver la fila de gente esperando para ingresar a la Discoteca Selfie, al momento de entrar puedes sentir como tu cuerpo empieza a bailar al ritmo de canciones como Dura, Te bote, Échame la culpa, entre otras. Una pareja baila alrededor de la pista con pasos muy sensuales que llaman la atención de los demás asistentes. Varios de ellos se quedan de pie al lado del bar para disfrutar de los cócteles que ofrece este bar. Quienes ya tenían reservado una mesa previa, sólo llegan y empiezan a disfrutar. De otra manera, quienes no habían realizado una reserva comienzan a buscar mesa para dejar sus pertenencias y unirse a la pista central de baile.

Pasando las horas regresamos al centro de la Plaza Foch, donde ya hay menos personas pues la mayoría de jóvenes entre 20 a 30 años se encuentran haciendo fila fuera de las discotecas para poder "rumbear" hasta la madrugada. Los karaokes también son muy concurridos, uno de los más conocidos es el Mongos donde además de poder cantar, los jóvenes pueden deleitarse con shots o tragos fuertes que les ayudaras a mantenerse toda la noche activos. En el Mongos ya se encuentra las personas que les gusta más el romanticismo pues mejor se escucha baladas, vallenatos y bachatas.

Sigue pasando la noche y en los karaokes se vive un ambiente más romántico que ayuda a parejas de amigos que logren a tomar el paso de convertirse en enamorados, con una que otra balada el chico se le declara a una chica para que sea su novia, al estar rodeada de varios amigos, ella no se puede negar y decide darle un sí como respuesta. Todos aplauden y con cócteles empiezan a brindar y molestar a los nuevos enamorados.

Pasada las 22H00 algunos jóvenes salen de las discotecas, luego de haber bailado durante toda la tarde, pues se escucha a sus padres llamándolos para que apresuren el arribo a sus respectivos hogares. Sin embargo, otro grupo de jóvenes recién buscan lugares de diversión y entretenimiento para pasar toda la noche. Una de las discotecas más visitadas a estas horas es The Blue que ofrece la posibilidad de ver cuan copado se encuentra, pues cuenta con una pantalla al ingreso del lugar.

Ya en horas de la madrugada, las discotecas y bares cierran sus puertas, muchas de las personas se resisten a salir de los lugares ya que quieren seguir disfrutando. Otros, sin embargo se retiran decididos a seguir la fiesta en alguna casa y los demás prefieren irse a sus casas en compañía de sus amigos o piden un taxi para irse a sus casas. Es así como se vive un viernes en la noche recorriendo las calles de "La Zona".